Escrita por el uruguayo Florencio Sánchez y puesta en escena por primera vez en el año 1905, Barranca abajo es considerada como una de las obras dramáticas más importantes del teatro rioplatense.
Don Zoilo es un anciano que ha trabajado toda su vida en sus tierras, la cual le usuroaron por medio de artimañas y engaños, obligando a él y a su familia a retirarse. Su esposa, Doña Dolores, su hija, Prudencia, y su hermana Rudecinda intentan encontrar a toda costa una manera de volver a la vieja estancia. Zoilo, al descubrir el plan, las "autoriza" a que se vayan y les pide que no se preocupen con él.
"Agarran a un hombre sano, güeno, honrao, trabajador, servicial, lo despojan de todo lo que tiene, de sus bienes amontonaos a juerza de sudor, del cariño de su familia, que es su mayor consuelo, de su honra... ¡Canejo!... que es su reliquia; lo agarran, le retiran la consideración, le pierden el respeto, lo manosean, lo pisotean, los soban, le quitan hasta el apellido... y cuando ese desgraciao, cuando ese viejo Zoilo, cansao, desecho, inútil pa todo, sin una esperanza, loco de vergüenza y de sufrimientos reseuelve acabar de una vez con tanta inmundicia de vida, todos corren a atajarlo. ¡No se mate que la vida es güena! ¿Güena pa qué?"*
*Florencio Sánchez, Barranca abajo, 2000, Montevideo, El País, tomo 16, Biblioteca de oro de literatura, p. 73
